¿Por qué te confundes y te agitas ante todos los problemas de la vida? Dejame el cuidado de todas tus cosas y todo te irá mejor. Cuando te entregues a mí todo se resolverá con tranquilidad según mis designios. No te desesperes, no me dirijas una oración agitada, como si quisieras exigirme el cumplimiento de tus deseos, cierra los ojos del alma y dime con calma JESÚS, YO CONFÍO EN TÍ.
Evita las preocupaciones angustiosas y los pensamientos sobre lo que pueda suceder después. No estropees mis planes queriendome imponer tus ideas, dejame ser Dios y actuar con libertad. Entregate confiadamente en mí, reposa en mí y deja en mis manos tu futuro, dime frecuentemente JESÚS, YO CONFÍO EN TÍ.
Lo que más daño te hace es tu razonamiento y tus propias ideas y quieres resolver tus cosas a tu manera.
Cuando me dices: JESÚS, YO CONFÍO EN TÍ, no seas como el paciente que le pide al médico que le cure pero le sugiere el modo de hacerlo, dejate llevar en mis brazos divinos, no tengas miedo, yo te amo.
Si crees que las cosas empeoran o se complican a pesar de tu oración, sigue confiando, cierra los ojos del alma y confía, continúa diciendome JESÚS, YO CONFÍO EN TÍ.
Necesito las manos libres para poder obrar no me ates con tus preocupaciones inútiles. Yo no quiero agitarte, angustiarte, quitarte la paz. Confía solo en mí, reposa en mí, entregate a mí, yo hago los milagros en la proporción de entrega y confianza que tengas en mí. Así que no te preocupes, echa en mí tus angustias y duerme tranquilo. Dime siempre JESÚS, YO CONFÍO EN TÍ, y verás grandes milagros, te lo prometo por mi amor.
PD: Recuerda siempre "Para Dios no hay nada imposible" (San Lucas 1:37)
Evita las preocupaciones angustiosas y los pensamientos sobre lo que pueda suceder después. No estropees mis planes queriendome imponer tus ideas, dejame ser Dios y actuar con libertad. Entregate confiadamente en mí, reposa en mí y deja en mis manos tu futuro, dime frecuentemente JESÚS, YO CONFÍO EN TÍ.
Lo que más daño te hace es tu razonamiento y tus propias ideas y quieres resolver tus cosas a tu manera.
Cuando me dices: JESÚS, YO CONFÍO EN TÍ, no seas como el paciente que le pide al médico que le cure pero le sugiere el modo de hacerlo, dejate llevar en mis brazos divinos, no tengas miedo, yo te amo.
Si crees que las cosas empeoran o se complican a pesar de tu oración, sigue confiando, cierra los ojos del alma y confía, continúa diciendome JESÚS, YO CONFÍO EN TÍ.
Necesito las manos libres para poder obrar no me ates con tus preocupaciones inútiles. Yo no quiero agitarte, angustiarte, quitarte la paz. Confía solo en mí, reposa en mí, entregate a mí, yo hago los milagros en la proporción de entrega y confianza que tengas en mí. Así que no te preocupes, echa en mí tus angustias y duerme tranquilo. Dime siempre JESÚS, YO CONFÍO EN TÍ, y verás grandes milagros, te lo prometo por mi amor.
PD: Recuerda siempre "Para Dios no hay nada imposible" (San Lucas 1:37)